Pomona
y Vertumno
Vertumno (la anciana) persuade a Pomona (François Boucher -1741)
Pomona,
diosa romana de la fruta, arboles, jardines y huertas, fue pretendida
por todos
los dioses campestres y no dio oídos a ninguno. Además les
prohibió la entrada en sus dominios cercando con altos muros sus
jardines. Pero Vertumno, Dios del cambio de las estaciones no se
resigno a tal desprecio. En vano se transformo en labrador, viñador,
segador, pastor y mil disfraces sin conseguir acercarse y hablarle.
Finalmente se convirtió en una mujer anciana, y con este aspecto
logro ver a Pomona y hablar con ella.
Le
contó la historia de amor de Anaxarete, princesa amada en demasía
por el joven humilde Ifis, tanto que acabo quitándose la vida por el
dolor que sentía del rechazo de la princesa, y antes de morir pidió
venganza a los Dioses. Afrodita, (Diosa del amor) para complacerlo,
transformó a Anaxarete en una estatua de piedra, mientras estaba
mirando por curiosidad los funerales del desgraciado muchacho..
La
elocuencia de Vertumno conmovió y persuadió a Pomona. Entonces
Vertumno recobro su forma primitiva y Pomona se avino a tomarle por
esposo.
Pomona y Vertumno